jueves, 21 de noviembre de 2013

Andres Calamaro en Salta (20/11/2013)

Andrés Calamaro en Salta - Bohemio Tour

El murmullo de la lluvia se confundía y difuminaba con la cháchara de las personas esperando por Andrés Calamaro, más conocido como el salmón, la noche de lluvia del 20 de Noviembre en el estadio Delmi de la ciudad de Salta. Pasaba por la linda, presentando su último disco "Bohemio". Algunos aplausos de impaciencia hacían entrever que ya era  hora, que la gran mayoría eran un público experimentado que quería escuchar en vivo temas presentes del pasado próximo.
Arrancó diez minutos después de lo estipulado (21:40) de manera impecable con "mi enfermedad", uno de sus clásicos, esos temas que cantas en la ducha o tarareás entrando al trabajo. Continúo con su repertorio, cual rocola de bar, apelando al inconsciente colectivo musical de todos. 
Inauguro su nuevo repertorio cantando la canción que más giro por las radios: "cuando no estas". Esa melancolía implacable que posee, la repetición de frases hundiéndote o elevándote se mantiene entre las armas que usa Andrés para llegar a su público. Y continúa haciendo mella. Público joven y no tanto se acoplaron a su voz ronca y partimos hacia la constelación musical del autor. Entre tema y tema nos comentaba: "Salta lo tiene casi todo. Salta la linda, Salta la trotska, las empanadas, el Cuchi y el folclore. Faltan corridas de toros nomás".
En medio del show hizo un pequeño homenaje al fallecimiento de Lou Reed, cantando una versión de "Walk on the wild side", adaptándola a su propio estilo.
Buscaba seducir al público cantando "Flaca", "crímenes perfectos", "el salmón", entrando al público por todos los flancos. Fue increíble observar que la estética del recital no distaba mucho de ser la del Indio Solari (una estética soft ricotera), un estilo rockero sobrio, con clichés habituales; Andrés colgó un Calamar de plástico en el micrófono y por un momento se puso una remera del Indio en la cara mientras tocaba; miradas experimentadas, recorriendo derroteros musicales ya surcados.
Por último cantó paloma y se retiro, volviendo con más fuerza para los bises a pedido de los espectadores, pre-cerrando con Alta suciedad y finalmente culminando con "de Música Ligera" poniéndose una remera de Soda Stereo en la cara y diciendo: ¡Fuerza Gustavo!. 
Afuera lloviznaba, recordándonos que el salmón en época de lluvia y contra todo pronóstico sigue su dirección, su destino, aunque ya este viejo y grande, desova sus versos musicales en las mismas afluentes donde la música nace.

Texto y fotografías: Agustín Pérez Marchetta


jueves, 7 de noviembre de 2013

Clavillo

Si me imaginara más encarnado y menos difuso, más clavo y menos martillo, no estaría atrapado en este cincelado de palabras y cosas, en estas garras teóricas que dejan el cuerpo estéril, inamovible. Si tan solo tuviera la fuerzas para para poner mi mente al sol y dejar que se seque de corrientes de pensamientos que siempre bajan hacia los afluentes más oscuros.
Si pudiera siquiera escapar con mis dedos de esta trama cognitiva, de este espacio invertebrado de minúsculas muertes e interconexiones, de este eterno devenir, de este imperativo artístico creacionista.
Si hoy fuera un feriado, o sábado o día de fiesta, estaría abrazado a tu cintura, tomando cerveza y riendo.

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Cortando la helada: el Indio en Mendoza (14/09/2013)


La llama del fuego ricotero devoró todo lo que tenía: mi celular, el fuego, el auto, los excesos y mis piernas. Ahí estábamos saltando, 120 mil personas, una tras de otra encadenadas en el pogo más grande del universo; veníamos de horas de previa y agite, en donde nos encolumnamos tras una bandera que decía “Vivir solo cuesta vida” y avanzámos hacia el autódromo para ser parte de esa peregrinación hacia la meca del sonido. Parecía que ese sábado 14 de septiembre todos los tiempos (todo el tiempo) coincidían en ese momento. Los días de escuchar temas en el auto, de silbarlos en la ducha, temas compartidos con cervezas con amigos, con pibas que muchas veces tenían remeras de un techo para mi país (¿o era una piba con la remera de greenpeace?) se cristalizaban en esa masa crítica de personas que no dejaban de delirar. El frío acestaba contra la multitud, pedíamos que el indio apareciera en el escenario y acabara con el gélido clima y nuestro hambre de rock.. Cada tanto una ráfaga de agite se expandía por el campo cuál ola de estadio (“el que no salta es inglés”)
Comenzó “Luz belito”, se arremolinaron los sentimientos en nuestros corazones y se inició un mosh magnífico (pogo en inglés); su ronda satánica de atraer gente al centro y luego la reacción lógica: vomitar personas; adultos con sus hijos fueron expulsados violentamente del medio y corrían asustados (Un par de culos va a patear/de los que le juran más lealtad). Nuestro grupo se rompió, de 50 iniciales que éramos me encontré haciendo una avalancha hacia el centro con tres pibes más sorteando la masa (con permiso y de costado siempre se avanza mejor). Llegamos hasta la punta del escenario, la gente empujaba excitada, buscaban las primeras filas, ver al indio, ser protagonistas. Todos filmaban al escenario y saltaban, querían disfrutar y a la vez poder conservar ese momento que condensaba muchos estados de ánimo y conciencia; una escena posmoderna de uno de los shows más vigentes y tradicionales del rock argentino. Mientras avanzábamos veíamos a los desencantados que retornaban asfixiados, parecía que no se justificaba semejante hazaña. ¿Por qué ese deseo irrefrenable de llegar ahí? ¿por qué todos yendo y viniendo hacia el pogo primigenio?
Retornando por el lado izquierdo avanzó una bandera gigante de Argentina. La enarbolamos y la gente pedía a gritos tocarla, meterse abajo; abrían espacio y llegó casi al escenario. Sonó “Juguetes Perdidos” (Este asunto esta ahora y para siempre en tus manos) y lloviendo de cara al cielo, nos conmovimos hasta el punto del llanto; por último terminó con un magistral “Ji Ji Ji”.
El rock volvió a conquistar y reconfortar nuestras almas, ayudándonos a no bajar los brazos, seguir luchando, derramando metáforas que nos permitan crecer sin nunca perder la ternura. Nos recordó que lo último que se pierde es la esperanza: “cuando la noche es más oscura se viene el día en tu corazón”.
Agustín Pérez Marchetta
Salta, Argentina

viernes, 2 de agosto de 2013

Gauchos de acero

Por ahí, por donde están los gauchos de acero asoma (¿o asomaba?) la nueva marginalidad de Salta. La periferia se constituye la media de la ciudad, estando horrorizados y apoltronados los sectores medios, sufriendo el avance del mercado en todos los aspectos de la vida y la cada vez mayor monetarización de los servicios. Cada vez es más fácil no tener donde caer muerto, hoy en día un auto cuesta lo que costaba un departamento hace 20 años.
Sin embargo acá, al costado en el corazón, tenemos estos sueños y queremos compartirlos. Nos atrevemos a soñar a sabiendas de lo doloroso de los sueños, de que podemos despertar en medio del sueño y chocar con la realidad, de que el que sueña comparte sus idealizaciones y muchas veces, sin quererlo, sus pesadillas

miércoles, 31 de julio de 2013

In Crescendo

Reinventar la política, reinventar lo político, reinventarse a uno día a día, cueste lo que cueste, buscando siempre horizontes que nos ayuden a soñar.

viernes, 26 de julio de 2013

Violencia intergeneracional intrafamiliar

(relato de una presidenta de una asociación) Fíjese si no esta instalada la violencia que cuando viene a buscarlos la bisabuela, con la cartera que parece un sanguche imperial, apenas los ve, ¡Paf!! en la cabeza y se los lleva.

lunes, 22 de julio de 2013

Dime como escribes...

escribiría todos los dias si no fuera tan desgarrador. Si no me dejara esa hendidura en el rostro cada vez que deslizo una palabra, sino hiciera que sienta que algo se esta yendo y cristalizando a lo lejos, ahí por las palabras

miércoles, 17 de julio de 2013

Raza maldita

En la era de la imagen me empecino con la escritura. ¿Quien va a entender la densidad de las palabras? Quien va a ser capaz de ver los abdominales lingüísticos, las sonrisas literales, la piel tersa y suave de la escritura?
Descorcho palabras que galopan con sus crines al viento en campos de verdad y mentira. Pasean entre soles y lunas (¿cuantos soles queres? te doy 5, 10, 200, los que quieras) con tanques de oxígenos inútiles, porque las palabras no respiran.
Me pregunto, al igual que Alejandra, si las palabras te ayudan a alcanzar lo que buscas o te alejan irremediablemente.
Alejandra me contesta:
.- obvio que te ayudan, sino no estaríamos acá riéndonos los dos.
Jajsafaksfjajaja

lunes, 15 de julio de 2013

Historia

Y entonces cuando se pregunten por el qué pasó, encontrarán estos, restos esqueléticos de materia inerte flotando sobre conceptualizaciones tan lejanas a la vida que no lo podrán creer.

lunes, 8 de julio de 2013

¡Oh! je voudrais tant que tu te souviennes

Mis uñas se fueron con vos, casi de forma idéntica: al momento de partir nadie dijo nada, la tensión en los dientes buscaba seccionar algo y orillaba las yemas... nuestros horizontes se hacían incompatibles, y las astillas del amor reventaban los globos rojos y tiernos que nos íbamos diciendo.
Mi amor arribamos juntos a un puerto de aguas tan profundas y nos quedamos en la arena pataleando y bromeando sobre lo que no éramos, sobre lo que podíamos ser. Te gustaba como alucinaba, yo con la palabra (¿o con la voz? ¿o con el cuerpo?) te dibujaba mundos que vos te encargabas de darle grandes pinceladas, siempre derrochando hermosos colores: rojos bermellones, violetas intensísimos, azules descollados. Uff, era la gloria, yo quería escribirlos, capturar el momento para no perder lo dicho, para que no se lleve el tiempo los hechos.
Las ganas de no morir me despiertan todas las mañanas y me obligan a seguir. Hoy no te tengo aquí y estas tan presente, quisiera abrazarte como aquella mañana de prestado que le arrancamos al destino. Quisiera estirar lo más que pueda este párrafo así no tengo que dejarnos, que dejarme, pero las palabras se van y agotado, esta mañana ya no es como aquella.

viernes, 5 de julio de 2013

Sueños

Soñé que de repente un par de amigos míos eran vampiros y me perseguían, me querían hacer vampiro a mí. Por alguna razón, yo los había contagiado o los había violentado y ahora venían con esa violencia a encararme. Yo no quería que me aplicaran la misma violencia que yo había utilizado para con ellos. Me parecían sumamente injustas las reglas. Las reglas que yo en algún momento había impuesto. Les tiraba sillas, les clavaba jeringas en el pecho, chorreaban sangre y me preocupaba después estar yo así...
Viene momento de reflexión y automáticamente estoy horizontal en mi cama tomando el vaso de agua que deje antes de acostarme

jueves, 13 de junio de 2013

Surfistas del Sistema, Luca Makonia y Massacre en Salta (9/07/2013)



Los límites no existen
No hay con que darle, musicalmente Buenos Aires es una madre adolescente que va pariendo bandas a más no poder. Sino no sé cómo se explica el gran show que dió Massacre el domingo 9 de julio en la ciudad de Salta y que viene replicando en su gira cósmica por más de 13 ciudades. Fue en Sublime, un local bailable que pasó su prueba de fuego como una posible alternativa de templo de rock a falta de lugares para tocar. Surfistas del sistema, uno de los hijos más recientes abrió el recital, teniendo tan solo ¡2 años! sonaron exquisitos, arrancando con un prolijo y desconocido “sistema solar”.
Salta, es un poco más agreste en lo que respecta al género musical, ya que no hay una profesionalización, ni tampoco un público que desborde establecimientos que permitan aflorar al género del rock tan fácilmente. Pero ojo, que hay bandas que prenden y se arraigan: de eso dieron testimonio los locales Luca Makonia, haciendo saltar a más de 200 personas que se fundieron en un solo pogo que por como se movían estaban a punto de salirse del local. “Tus hermanas”, “volvé”, “anita”, “tosiendo sangre” calentaron los motores para la llegada del plato fuerte.
Y entonces los héroes, Massacre comandado por un Walas tierno y bello (“la gente de salta son unos bombones y bombonas de chocolate rellenos con licor”) me trasladaron por un momento a los recitales de Buenos Aires y entonces me olvidé que me había venido a vivir al norte de nuestro país y me sentí en casa. De repente Argentina era un solo acorde y llevaba como estandarte la bandera del Rock.
Cambie el tango por el folclore, la pizza por la empanada y lo infinito de la costanera por dos cerros gorditos que me saludan todas las mañanas. Les escribo a más de 1600 kilómetros de distancia no para decirles que nos iluminen con las luces de la capital, sino para decirles que aquí estamos. Que el rock en el interior también se da.
Agustín Pérez Marchetta

Salta, ex Almagro

lunes, 10 de junio de 2013

martes, 4 de junio de 2013

Naked Guittar

Hoy soñé que se me rompían las cuerdas de la guitarra (se me rompían a mí, obviamente, no a la guitarra), estaban rotas, no todas, solamente las que están arriba, las que hacen los sonidos graves, no los sonidos claritos, lindos, churitos de las de abajo. Las graves, las que le dan sustento a la melodía, que marcan el ritmo, que te llevan a pensar que estas en una batidora musical cuando tocas lo que otros no sabían que esperaban escuchar.
Yo quería tocar y me daba con que estaban rotas las cuerdas. Todas no, podría haber tocado, pero me agarro la desolación, la desesperanza, la mala racha.

martes, 28 de mayo de 2013

Por qué me gustan las guitarras crudas (folk)

Quiero escuchar alguna guitarra lejana, en algún lugar que me permita irme lejos, recorriendo todas las fronteras y pararme justo frente a lo que apenas soy y reconozco. Acurrucarme en el otro y dormir su sueño eterno

sábado, 18 de mayo de 2013

En el ombligo del mundo

Cómo nadie él tenía la capacidad plena (casi extrema) de leer todos los comentarios de facebook*, uno tras otro hasta llegar hasta donde habían dejado los de la noche anterior; desde su concepción era un marcador mucho más fidedigno del entramado social facebook que los diarios, aunque siempre no le quedaba claro -acaso se daba cuenta de esto antes de dormirse en su cama, o el tiempo que tardaba el ordenador en apagarse?- el grado de representación y alcance del mismo. 
Odiaba los spameadores* de mascotas, que ponían todo el tiempo imágenes de perros harapientos a punto de desfallecer buscándoles un hogar donde cobijarse, o los gorilas empedernidos que publicaban todo con signos de admiración, citando palabras moralistas (Vergüenza, Fastidio, Impotencia, Rabia) usando el facebook como si fuera un foro romano donde todas sus condiciones -incondicionales todas- llegaban directamente al oído de los gobernantes. En menor medida le molestaban los introvertidos extrovertidores de facebook, los cuales encontraban prioritario contar todas y cada una de sus experiencias -especialmente las sensitivas como comer, dormir, amar y odiar- mediante el muro, llegando al estado de felicidad plena, ya que, según las reglas actuales el problema de todo reside en la comunicación.
Casi ya no entendía porque se había embarcado en esa tarea inútil de ser uno de lo mejores scrolleadores* de su zona, si valía la pena las horas volcadas al surfeo digital, si lo seguían confortando la lluvia de me gusta según compartiera contenidos que le parecieran indicados. Su tiempo era tan sagrado, ¿por qué lo utilizaba tanto en navegar las redes sociales? 
Detestaba los desastres naturales, los golpes militares, las muertes, lo sacaban de quicio... podía tardar días en llegar a las actualizaciones anteriores



Spameadores: personas que se dedican a llevar adelante spam en diferntes medios (redes sociales, mail, conversaciones). Captan cierta información y la reproducen sin ningún aditivo y por lo general con muy poca reflexión de su parte
Facebook: actualmente una de las redes sociales virtuales más grandes a nivel mundial. Cada usuario posee un perfil y acepta amigos, interactuando con ellos e intercambiando 
Scrolleadores: el mouse (o raton) que utilizamos para mover el puntero en la pantalla de las computadoras actualmente traen un boton para desplazarse por los contenidos de la pantalla, permitiendo avanzar con mayor velocidad que con la barra de desplazamiento de las ventanas ubicadas por lo general en el margen derecho.

miércoles, 15 de mayo de 2013

Obituario

En el día de la fecha, en el lienzo de nuestra mente falleció nuestro amigo, enemigo, interlocutor, rey y peón: el tiempo. Se lo notaba mal debido a que todos ponían buena cara. Su amigo el dinero, su amigo prestado, su amigo sueño, su amigo trabajo, su amigo ocio lo saludan. Sobraba cuando no era necesario, faltaba en los eventos de nuestra vida más apremiantes.
Quizá lo que más le duela a este viajero es que, al que corría libre por los campos terrenales y las praderas cósmicas, lo hayan encerrado en casilleros, latitudes, cuentas matemáticas -¡y cuántas cuentas!-, medidas, fracciones, departamentos, habitaciones, programaciones. Algunos lo entendieron más (o lo entendieron menos) y se dirigían a él como ratitos, momentos, tardes, amaneceres, soledades. Otros fueron más canallas y cuando decían reivindicarlo lo mataban implacablemente.
Siempre lineal y nunca múltiple hoy lloramos nuestro tiempo que ya no esta. Nos nos damos cuenta (¿porque ya no lo tenemos?) que el ríe con cada muerte nuestra, porque sabe que el tiempo somos nosotros.

jueves, 2 de mayo de 2013

La política y él político

Uno de los problemas de la política es la necesidad de dejar de lado el individualismo y los intereses personales.
Weber establece que en la modernidad hay una difuminación entre fines y medios, ya que en la modernidad se pierden los horizontes de sentido generales. Dios ha muerto y hay muchos Dioses. Marx desde su teoría establece algo parecido cuando dice que el esquema Mercancía-Dinero-Mercancía es cambiado en el capitalismo por Dinero-Mercancía-Dinero' (dinero prima).
En la política pasa algo parecido. Si uno esta en política por la búsqueda de cargos y reconocimiento, el crecimiento político sera sumamente limitado, primando las internas por sobre el programa o la visión de lo social.
Quienes vayan por el primer tipo de política se quedaran con el cargo, quienes vayan por el segundo irán por la revolución social

domingo, 28 de abril de 2013

Algunas veces, cuando sueño con el corazón, se me da por soñar con política. Y me mando a soñar nomás. Sueño con la patria grande, con que las personas dejen el egoísmo individualista de la personalidad, que dejen el individualismo colectivo de los nacionalismos y empiece a ser libre, a sudar la política positiva de querer al otro y querenos a todos. Sueño con una patría grande, tan grande que ya no es patria sino mundo. Con mares de discursos veleidosos que inviten a la alegría, al diálogo y la comprensión,